Un día, Henry Ford dijo: “Si hubiese escuchado lo que la gente quería, estos me hubiesen pedido caballos más rápidos”. Veinte años más tarde, los caballos habían desaparecido de las carreteras. Hoy, los vehículos llegan con seguridad avanzada, combustibles alternativos y paquetes de asistencia de conducción inteligente. ¿Pero qué hay de los vehículos del mañana? Los continuos avances en las comunicaciones 5G dan lugar a una movilidad inteligente, una conectividad para vehículos que se enfoca en mayor seguridad vial, un medioambiente más sano y una total experiencia conectada.
La movilidad del futuro
La Unión Europea financia la innovación tecnológica para dar solución a los problemas de movilidad que generan 2 millones de muertes y 35 millones de heridos anualmente. La UE promueve la movilidad limpia mediante un sistema organizado, eficiente y digitalizado, con intercambio de datos y normas interoperables.
El avance de las telecomunicaciones conecta el vehículo autónomo a todos los agentes involucrados en la movilidad y el tráfico. Esta conectividad, requiere una cantidad masiva de datos de múltiples fuentes. Es aquí donde el Big Data, la nube y la ciberseguridad actúan como vehículos de análisis, recolección y protección de la información provenientes de infinidad de unidades de software y hardware.
La comunicación en la movilidad del futuro
Según PWC, los beneficios generados por los vehículos conectados ascenderán hasta los 160 mil millones de dólares para 2030. Impulsando la movilidad del futuro encontramos las comunicaciones V2X (conexión entre el vehículo y todo) que permite a los vehículos conectarse virtualmente con infraestructuras, personas, redes y otros vehículos. De acuerdo con el Departamento de Transporte de EE. UU. existen varios requisitos principales para el V2X:
- Everything: si los vehículos e infraestructuras no pueden comunicarse entre sí, los servicios de seguridad básicos no funcionaran. Por ello, la conectividad interoperable se hace necesaria.
- Everywhere: en todas partes, los vehículos viajan a varios lugares más allá de zonas residenciales o urbanas como por montañas o túneles dónde no hay tantas infraestructuras implementadas.
- Intergeneracional: la vida promedio de los vehículos es de 12 a 15 años por lo que, si las nuevas tecnologías se reemplazan una a las otras, los nuevos vehículos y los viejos no podrán comunicarse entre ellos. Para ello, se necesitará la “backward compatibility”.
- Escalabilidad: para que la comunicación no comporte riesgos a la seguridad, esta ha de ser fiable para cada vehículo particularmente en casos de alta congestión.
Las comunicaciones ITS (Intelligent Transport Systems) tienen dos variantes principales. A parte del V2X (vehicle-to-everything), encontramos la comunicación V2N (Vehicle to network) donde las señales se transmiten mediante redes de telecomunicaciones. El V2N es útil para enviar grandes cantidades de información a los servicios en la nube o centros de gestión del tráfico. La fusión de estas dos tecnologías crea la comunicación hibrida.
Fuente: V2X Supporters for Transportation Safety
El ecosistema de soluciones de la movilidad
Mediante la conectividad y un sistema de interconexión a la nube, la gestión mediante señalización del tráfico urbano podría ser agilizada, reduciendo así los retrasos. La tecnología empleada por los vehículos implementará un sutil sistema de maniobra en la aceleración y freno paralelo a la monitorización del tráfico circundante. Los vehículos semiautónomos con Control Adaptativo de Crucero son muestra de esta prometedora función.
Con respecto al transporte pesado, el incremento de la automatización creará nuevos modelos de negocio para los camiones de largas distancias, autobuses y la circulación de bienes y personas. También se dará paso a diferentes actores tecnológicos que desarrollarán sistemas operativos de conducción autónoma, generarán plataformas inteligentes de gestión de la movilidad (que facilitarán mejores rutas y precios) o relativas al procesamiento del Big Data generado.
Las calles se reinventarán para adaptar el estacionamiento en espacios flexibles aptos para la recogida o entrega, para paradas transitorias durante horas punta, uso comercial por las tardes, además de carga y descarga durante las noches. Aparecerán “hubs” de movilidad donde se aunarán diversas opciones de movilidad y también aparecerán los parquímetros inteligentes, adaptando sus precios y tiempos a la demanda del mercado en tiempo real.
Ciberseguridad y movilidad
¿Podremos manejar la seguridad con tanta disrupción digital? ¿Que podría ir mal? Muchos retos aparecerán con el aumento de las infraestructuras vulnerables para las que no cabrían segundas oportunidades en caso de ataque. Por ello, para enfrentar los problemas de este ecosistema se necesita un enfoque holístico. A medida que aumente la interacción entre el vehículo y las infraestructuras de sistemas de movilidad, se concebirá una red a modo de “Internet of Vehicles” o “Internet of Mobility” con una gestión por la cual, en caso de hackeo se cerrarían determinadas secciones de carreteras o flotas de vehículos en función de la localización de los ataques.
Conclusión
El potencial de la transición a la movilidad del futuro dará paso a una gran industria que podría compensar las pérdidas económicas o laborales. Existen diversas barreras de mercado para la adopción de una conducción automatizada y conectada, en particular considerando seguridad y fiabilidad. Las soluciones de conectividad constituyen una clave primordial para el sistema de conducción automatizado y ciberseguro, considerándose una prioridad entre los competidores de la industria.
Teldat, lleva años desarrollando equipos especiales para vehículos y sigue investigando nuevas tecnologías para todo el entorno de las comunicaciones y ciberseguridad enfocados hacia el mundo de los vehículos.