Las redes de baja potencia y largo alcance (LPWA) ofrecen una serie de ventajas que las convierten en las candidatas idóneas para el desarrollo del IoT.
El Internet de las Cosas (IoT) es un concepto que nos es familiar desde hace años; pero ha ido ganando terreno en los últimos tiempos. Lo que es seguro es que las redes de baja potencia y largo alcance (LPWA, por sus siglas en inglés) supondrán un enorme estímulo para estas tecnologías. ¿Por qué? Principalmente porque, para garantizar su viabilidad económica,, las aplicaciones y dispositivos del IoT tienen que ser económicos y tener baterías de larga duración. Las redes de baja potencia y largo alcance ofrecen precisamente eso, y algunos estudios preliminares auguran ya entre 5.000 y 7.000 millones de conexiones LPWA para el 2022.
Además de los bajos costes y las baterías de larga duración, las LPWA serán especialmente útiles para los sectores IoT que:
1. Apenas precisen transmitir datos.
2. Requieran escasa movilidad.
3. Se encuentren en lugares de difícil acceso.
4. Consuman poco.
5. Tengan un largo alcance y precisen mayor seguridad.
Se mire como se mire, la tecnología móvil existente no funciona de manera óptima en los escenarios previamente descritos. De ahí que la viabilidad de las redes LPWA despierte interés.
Conexiones LPWA
Lo que parece seguro es que las operadoras de telefonía móvil son las principales candidatas a la hora de ofrecer conexiones LPWA, puesto que su infraestructura actual no necesitará someterse a grandes cambios.
En principio, los operadores móviles solo tendrán que introducir pequeñas mejoras en sus redes actuales.
Es más, la cobertura de estas redes móviles se extiende por la práctica totalidad del planeta y el roaming permite cruzar fronteras nacionales sin problemas.
Además, suele haber más de un operador en cada país, con lo cual, la competencia queda prácticamente garantizada y los precios se mantendrán bajos.
¿Cuáles serán los principales sectores beneficiados por el LPWA?
Muchos sectores económicos comparten los requisitos mencionados. Como ejemplo, basta con mencionar el sector agrícola, el de servicios, el sanitario, la automoción, el transporte, el sector industrial, los dispositivos que se pueden llevar puestos (wearables) y muchos más.
- Suministros: las compañías de suministros necesitan medir y monitorizar bajos niveles de datos de forma periódica (ya sea para obtener datos sobre el consumo de un cliente o como sistema de respaldo para detectar fallos, fugas, etc.). Las redes LPWA también podrían usarse en plantas de producción de energía.
- Ciudades inteligentes: si tenemos en cuenta el potencial de las redes LPWA, su impacto no se limitará a las compañías responsables de los suministros. Esta tecnología podría emplearse en multitud de servicios públicos: desde los que necesitan un alto grado de control (como el alumbrado de las calles, la policía local, el sistema de alcantarillado, etc.), hasta aquellos que proporcionen ingresos para el consistorio (sistemas de aparcamiento, alquiler de bicicletas, peajes en zonas céntricas, etc.).
- Fabricación: del mismo modo, se pueden usar sistemas de respaldo LPWA en el sector de la fabricación para detectar fallos a lo largo de la cadena de montaje, en los talleres o en cualquier otro lugar. Incluso podría servir para monitorizar procesos y asegurarse de que todo se mantiene a un nivel óptimo.
- Edificios: la tecnología LPWA puede integrarse en edificios de oficinas, tanto públicos como privados. Por ejemplo, serviría para regular desajustes en la luz o la calefacción, o para controlar a las propias máquinas. Por ejemplo, en un hogar esta tecnología podría servir para controlar la temperatura del frigorífico y, en una empresa, para medir el nivel de tinta de las impresoras.
- Sanidad: el sector sanitario podría hacer uso de las redes LPWA en dos campos principales: pacientes e infraestructuras hospitalarias. Cada vez se opta más por mantener a los pacientes en casa porque, por un lado, se reducen costes y, por otro, tienden a mejorar más rápidamente. Emplear la tecnología LPWA en pacientes para monitorizar su presión arterial, niveles de oxígeno en sangre, etc. es esencial para poder mandarlos a casa pronto. Por su parte, en lo que a infraestructura se refiere, los hospitales son candidatos perfectos para convertirse en edificios inteligentes.
- Agricultura: las redes LPWA permitirán realizar un seguimiento de los animales vivos (ya se trate de ganado o de animales salvajes cuyo paradero se quiera averiguar). Además, también se podría monitorizar el terreno para mantener unos niveles de humedad perfectos.
- Transporte: a pesar de que ahora existen sistemas de seguimiento para vehículos, no se pueden rastrear las mercancías desde un ordenador a tiempo real. La mayoría de procesos de localización se hacen a través de códigos de barras cuando los artículos llegan a un determinado punto. Sin embargo, la tecnología LPWA permitiría tener los paquetes siempre controlados.
- Wearables: con el uso de redes LPWA, niños pequeños y ancianos podrían llevar puestos sencillos dispositivos de seguimiento que permitan tenerles controlados y evitar que se alejen de una determinada zona.
En general, la impresión que uno se lleva al hablar con expertos de sectores tan dispares como operadoras telefónicas, compañías de suministros, fabricantes de dispositivos, módulos y chipsets e integradores, es que la tecnología LPWA va a suponer un enorme estímulo para el IoT.
En Teldat, llevamos casi veinte años fabricando routers móviles y dispositivos inalámbricos, y vigilamos de cerca cualquier avance en materia de redes LPWA como también hemos hecho con otras tecnologías móviles.